El CEO debe trascender las métricas de eficiencia (ej. Cost-Per-Acquisition reducido) y enfocarse en los indicadores clave de rendimiento (KPIs) que reflejan el valor incremental de la conexión estratégica.
El Nuevo ROI se calcula mediante métricas de impacto consultivo:
TLV (Total Lifetime Value): El valor de por vida del cliente, segmentado por el uplift generado por la intervención de la IA (ej. Upselling predictivo).
SVD (Service Value Density): La relación entre el margen de beneficio de un servicio y la cantidad de tiempo humano dedicado a su entrega. La automatización debe maximizar esta densidad.
RSL (Ratio de Soluciones Lideradas): Porcentaje de propuestas de servicio que abordan problemas no articulados previamente por el cliente, demostrando el valor predictivo de la IA.
Rendición de Cuentas: Estas métricas demuestran que la IA es un acelerador de Gross Margin. El framework de medición debe ser transparente y demostrar la causalidad directa entre la inversión algorítmica y la expansión del valor de cliente.
